La parálisis por indecisión es un problema más común de lo que parece, y no solo es un concepto qué pasa en el macro de la gestión de un proyecto, si no en el micro de la administración de lo que harás en el día.
Muchas tareas por hacer y poco tiempo para ejecutarlos, puede paralizarnos en no saber cómo iniciar y el resultado será que no se haga nada.
Es un ciclo vicioso qué no tiene fin.
Un método simple para hacer las cosas qué tienes qué hacer, es no pensar, solo actuar siguiendo un procedimiento, eso hace mucho más fácil no paralizarse y procrastinar en el camino.